Comenzaron los preparativos para la gran fiesta que se viene. La apertura significa uno de los números más importantes para este acontecimiento, porque da la bienvenida a los artistas y al público.
Mariano Gottig es el encargado de coordinar al grupo de la presentación. Hace nueve años que participa activamente de cada Fiesta del Teatro. “En cada edición cambia mi rol, por ahí me toca ser el director general de la apertura o director de coreografía” comentó. En esta oportunidad, le propuso a Milena Weiss que sea coordinadora de coreografía. Además, colabora Cristian Buffa.
Todas las aperturas tienen temáticas diferentes y aleatorias. Este año será sobre hadas y elfos. El año pasado, con Mariano Gottig como director general y Ailén Saluzzio como directora de coreografía, hicieron una representación de un futuro post apocalíptico. “A la apertura la preparamos en dos semanas, fue ambientada luego de guerras nucleares, con dos bandos enfrentados. También invitamos a pasar a gente del público y los pintamos, fue participativo”.
En todas las aperturas los actores aprenden ritmos nuevos, según la temática. “La mayoría no baila, nunca hizo danza contemporánea y en este momento lo aprenden para esto”. En cuanto a las especificidades de cada actuación, Mariano agregó: “Aquí no hay protagonistas, a veces se da que algunos están más tiempo en escena que otros, pero apelamos a contar una historia. En este sentido, todos ensayan y aprenden todas las coreografías, porque si uno falta hay que reacondicionar todo de nuevo”.
Es notorio que “el que actúa acá es el que realmente se compromete, aunque te cueste sudor y lágrimas”, así dice el director general. En el ensayo se los puede observar ayudándose a aprender los bailes y movimientos, en equipo. “Todos son importantes dentro del grupo” aseguró Mariano Gottig.
El grupo
El grupo que ensaya a diario y por horas, es heterogéneo y se formó en gran parte con quienes fueron parte del ballet de la avicultura, encargados de dar inicio a cada gala de la fiesta que vivió nuestra ciudad en noviembre. También lo integran una decena de actores del grupo independiente Kenuria Agapi -dirigido por Mariano- y gente interesada en participar aunque no pertenece a ningún grupo formal. “Asimismo, hay chicos de teatro que son colaboradores externos, nunca se van, vienen a los ensayos y nunca se despegan”.
El adelanto de la fiesta -que antes se realizaba dos semanas más tarde- y el comienzo en esta fecha de los ensayos, favorecieron a que quienes participan en actividades académicas fuera de la ciudad.
Mariano propone vestuario y maquillaje, todo depende de las telas que se consigan en Argentina y los precios. “Tiene que ser todo lo más fiel posible a la idea que yo tenga. Respecto a la escenografía, también copiamos algo que nos interesa y lo hacemos de acuerdo a los materiales con los cuales contamos. La idea siempre es reciclar: papel, cartón, cartapesta… se pueden crear un montón de cosas. Ya conseguimos todos los elementos”.
Este año las actividades están más sectorizadas. Hay gente que se encarga de la escenografía, dirigidos por Gloria Albornoz, y quienes estarán en la parte de actuación y baile. Generalmente, el grupo que participaba en la creación y armado de escenografía era el que tenía derecho a actuar. “El trabajo es de sol a sol, taladrando, serruchando y pintando. Todos ayudan”.
Acerca de la fiesta
Mariano Gottig afirma que “Desde el punto de vista de los teatreros, aparte de ver las obras y del nivel que tienen, la fiesta es un intercambio de cultura fantástico, sobre todo cuando vienen de afuera”. Luego agregó: “Se forman lazos muy importantes y somos solidarios en las convocatorias relacionadas al teatro. Por las noches hay guitarreadas donde cada uno muestra sus distintas destrezas: algunos saben cantar, otros saben bailar o hacen juegos”.
Hebe Schmidt, quien lleva años en el teatro de la ciudad, comentó: “Es una alegría gigante porque es un ambiente muy lindo, el del teatro siempre fue así. Después de las obras, hacemos todo juntos”.
Camila Mernez, si bien hace tiempo que hace teatro, es la primera vez que participará en la apertura. “Te encariñas mucho con la gente, la cual es nueva y ves todos los días. Pasan todas las edades por acá”.
Por el lado de la ciudad, “la gente ve obras de nivel y se van formando, eso se debe a los grupos locales que generan su propio público durante el año y acompañan en la fiesta. Además, hay gente que se copa tanto que empiezan teatro” aseguró Mariano Gottig.
Es fundamental destacar que hay un gran equipo atrás que hace posible esto, como dice Camila “hay que estar cocinando en las escuelas, estar pendiente si a alguien le pasa algo, desde el que está arriba manejando el sonido hasta el que está en la cocina haciendo el aguante”.
“Abrir y cerrar el encuentro es muy significativo: abrir para que venga la gente, para que conozcan Crespo y se vayan enterando en la plaza y el cierre es el broche de oro. Estamos súper contentos de participar” dice Hebe Schmidt. En este sentido, Mariano Gottig sumó: “Las expectativas son muy altas, siempre queremos superar la fiesta anterior”.